BEDOYA MONTOYA CARLOS MAURICIO
Puede ser que el disparo no sea ele ejecutado con clase y virtuosismo para que ese maravilloso artefacto de la imaginación popular -que vuela, rebota, sube, baja y jamás se cae- vaya hacia la apoteosis de un gol, sino también el de una pistola. Todo es posible en medio de una cultura de violencia en la que puede suceder que el prodigio de una jugada imposible se revuelque en el fango sanguinolento de una canchita de barrio.
Relatos sobre carencias, las ilusiones perdidas, la esquiva fortuna y la muerte andan -y acechan-, en estas paginas en las que hay voces de pueblo que resuenan en esquinas y otros recuerdos. Los faltantes materiales a veces avivan los sueños. A veces, los matan. Y en medio de paisajes siniestros y entristecidos, puede irrumpir la alegría de vivir, que tiene cara de muchacha bonita y sonriente.
Reinaldo Spitaletta